Estoy pasando muerto este año por razones fiscales
Normalmente prefiero no coger pacientes menores de edad. Al contrario de lo que se sugiere por ahí, esta decisión no tiene nada que ver con sugerencias de mi abogado. Sin embargo, este caso en concreto merece una excepción. No se conocen muchos niños con 80 años de edad.
Al menos fuera del gobierno de Italia.
El chaval sufre problemas de integración. Y de integridad. De integridad física, quiero decir. Algún lado malo tenía que tener lo de ser incorpóreo. Lo bueno es que es un chico muy majo, sin dobleces. Casi, casi transparente.
La verdad, no sé muy bien qué pretende de mí. Mis habilidades son ajenas a algunos de sus problemas. Porque por mucho que yo me esfuerce, será imposible que logre llevar una vida normal mientras no esté... bueno, mientras no esté vivo. Por si acaso, he decidido proponerle una serie de ejercicios para ir ganando tiempo:
- Tratar de ampliar su círculo de amistades a personas normales. Christina Ricci no cuenta.
- Caminar. Y no me refiero a dar paseos, sino a pisar el suelo por el que pasa. No es una metáfora.
- Da igual lo que le haya dicho "una señora venida del futuro": NO debe lavarse con Neutrex.
- Cambiar de nombre. En su defecto (valga la redundancia), fichar por alguna cadena de televisión española.
- Ver Redes en lugar de Cuarto milenio. Aunque esto poco a poco. Tampoco quiero que se entere de sopetón de que los fantasmas no existen. Ya tuve bastante aquella vez que hice lo mismo con Dios...
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